Un eterno seductor del balón y las mujeres. , jugador colombiano, relacionado en las últimas horas con por ser un posible refuerzo para buscar ganar la y hacer historia en la ‘Copa Sudamericana’, es un jugador que siempre está en la polémica. Unos creen que es por ese espíritu trasgresor que lo gobierna y lo expresa en el campo de juego y para otros, porque siempre anda al límite de lo legal y hasta ha mirado para el lado que no debe.

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Un jugador diferente, que ha paseado su juego por Europa y América, sea burlado de las hinchadas contrarias. Es famosa la provocación que el hizo a los seguidores de Boca Juniors, jugando por Rosario Central, marcando con su mano una especie de una franja por todo su pecho, recordándoles que jugó en River Plate, el eterno ‘enemigo’. Se peleó con un compañero en una práctica de Racing y se ‘ganó’ muchas tarjetas rojas por tocarse los genitales frente a una tribuna rival.

Todo eso está dentro de un campo de juego y hasta podría decirse que está normalizado, pero el colombiano ha traspuesto una línea que rompe los códigos del balompié y de la vida.

El 2017, el popular ‘Teo’ regresó a Junior de Barranquilla, luego de su paso por el balompié argentino. Lo presentaron en el estadio ‘Metropolitano’. Ese día solo saludo a sus seguidores, levantó la mano a todas las tribunas y se fue. Eso no importó a los fanáticos. Un total de 40 mil hinchas lo recibieron con aplausos. Fue la contratación más espectacular de esa temporada. El equipo invirtió cerca de 2 millones y medio de dólares y la gente respondía emocionada.

En ese mismo plantel, se encontraba el paraguayo Roberto Ovelar, famoso en nuestra patria por su paso por Alianza Lima, Juan Aurich y otros clubes. Había llegado a la institución hace dos años, estaba realizando una buena campaña y recibió con buenos ojos la llegada del nuevo compañero.

Pero todo se resquebrajó al poco tiempo. Gladys Ortega, esposa del popular ‘Búfalo’, le comentó a su esposo que el colombiano, vía Redes sociales, intentó seducirla. De inmediato el ‘Guaraní’ tomó cartas en el asunto y encaró a su compañero, sin importarle que sea el ídolo del equipo. ‘Hace unos meses mi esposa recibió una solicitud de mensaje que provino de la cuenta personal de la red social de un ‘compañero’ del equipo. Luego que ella me comentara la situación, me le acerqué muy amablemente y me manifestó que no fue él. La situación nunca quedó clara’, expresó tiempo después. Y dio más detalles. ‘Quise poner por encima los objetivos de un gran equipo y que esta situación personal no generara inestabilidad en el grupo, aislando mis sentimientos lo más humanamente posible y evitando violencia física y verbal’, puntualizó.

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Al final, se tuvo que ir prestado a Millonarios de Bogotá y ‘Teo’ se quedó disfrutado de su impunidad.

Lo peor que no fue su único problema con la pareja de un compañero. También lo vincularon con Karina Cruz, la esposa de su compañero James Sánchez.  Días después del nuevo rumor, la pareja salió a desmentir que estaban separados.

Así es el jugador que quiere Universitario, de grandes condiciones en el campo de juego, pero con el título de ‘Partidor’ bajo el brazo, que siempre provoca rechazo en un plantel. Quizá se bueno con la pelota, peor fuera de una cancha, es más peligroso.

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