A consecuencia del alto índice de en Santa Anita, los vecinos del distrito junto al padre Marcel Rineau, párroco de la capilla Cristo Redentor, organizaron el ‘Gran oxigenatón de Santa Anita’, que tiene por objetivo recaudar fondos para la adquisición de una planta de oxígeno medicinal. A fin de alcanzar el objetivo, se hicieron rifas solidarias y se pidió donaciones en latas.

se dividieron en grupos y, siguiendo todas las medidas de seguridad para evitar contagios, recorrieron las calles del distrito y agradecieron a quienes colaboraron en beneficio de pacientes con coronavirus.

Clausura

Este sábado 22 de mayo desde el mediodía será la clausura de esta gran iniciativa solidaria en la capilla Cristo Redentor. El evento, que contará con la participación de artistas locales y nacionales, será transmitido a través de su página de Facebook (@OxigenatonSantaAnita), donde también están las formas de apoyo.

“Invito a todos los vecinos y personas de buen corazón a participar en la gran oxigenatón. Nuestros hermanos enfermos de covid necesitan el oxígeno”, expresó el padre Marcel.


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Programa social ayuda a los indigentes a regresar con sus familias

Iniciativa del municipio de Lima hace que las personas que viven en las calles tengan una mejor calidad de vida. Esperan que este proyecto se replique en otros distritos de la capital.

 Desde que empezó el programa ‘Volver a casa’ de la , más de 500 personas, que vivían en las calles, han regresado con sus familias.

“Antes de llevarlos a un albergue tratamos de contactar a sus parientes. La idea es que vuelvan con sus seres queridos y disfruten del calor de hogar. Muchos de ellos no quieren nuestra ayuda. Los comprendemos, pero insistimos porque sabemos que en algún momento aceptarán cambiar de vida. Sería bueno que los demás municipios ejecuten este proyecto en sus zonas”, indicó Roxana Alvarado, representante de la iniciativa social.

Bonito final

Una de las personas beneficiadas es Ysabel Pesantes (61), quien vivió en las calles del centro de Lima por más de 20 años y que para trasladarse se arrastraba en una carreta de madera. Ahora ella está alojada en el albergue Rosario María Araoz, donde recibe atención médica, psicológica y rehabilitación física. Además, ya se le colocó la primera dosis de la vacuna contra el Covid.

“Fue muy duro su caso. Tiene quemaduras en el 70 % de su cuerpo, por eso, sus músculos están atrofiados y no puede caminar. Por mucho tiempo se resistió a nuestro apoyo, pero al final aceptó ser trasladada a un albergue. Han pasado tres meses y ahora su actitud es otra, está tranquila y feliz”, contó Alvarado.


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