Se me cayó ese chibolo que jugó en Ayacucho
Se me cayó ese chibolo que jugó en Ayacucho

Del saque somos carnecita. Hoy es el penúltimo día del año y la gente no deja de hacer travesuras. El defensa crema que corta la marca como una ‘chaveta’, estuvo liquidando el sábado hasta el otro día. Esta vez se ‘acharló’ y se fue al sur. Parece que estuvo mucho rato en la playita, porque regresó bien bronceadito y recontra movido. Asuuuuuu.

Ya me contaron que el fin de semana reapareció a lo grande ‘Puchungo’. Llegó a Punta Hermosa y, como el chalaco es respetado, le dieron un lugar exclusivo en un tono. Vendía imagen, bien elegante, una mano en el bolsillo, lentes oscuros, encima tomaba poco y las chibolas lo miraban como si fuera un ‘Porsche’. Lo que ellas no saben es que el hombre va en su auto solo a los tonos, porque los demás días chapa su rica combi y paga su ‘china’. Y no va ser.

Se me cayó ese chibolo que jugó en Ayacucho y este año no pintó en el Rímac. Tiene un hermano que anda con la clavícula rota y fue a tocarle la puerta para que lo apoye con medicinas, pero el pelotero se hizo el loco y le dijo que busque chamba. Qué feo.

Así que el ‘Motorcito’ estuvo en la rumba que el ‘Churrito’ hizo por su cumpleaños en el sur. Dicen que fue el secretario de ‘organización’, se ocupó de los detalles para que todo salga bien. Lo malo es que no ‘pescó’ nada y las muchachitas se fueron con los más chibolos. Los años no pasan en vano.

Por si acaso, mañana vengo más afilado que nunca con el ranking de lo bueno, lo malo y lo feo del 2015. No vale picarse. Me voy, soy fuga.

Del saque somos carnecita. Hoy es el penúltimo día del año y la gente no deja de hacer travesuras. El defensa crema que corta la marca como una ‘chaveta’, estuvo liquidando el sábado hasta el otro día. Esta vez se ‘acharló’ y se fue al sur. Parece que estuvo mucho rato en la playita, porque regresó bien bronceadito y recontra movido. Asuuuuuu.

Ya me contaron que el fin de semana reapareció a lo grande ‘Puchungo’. Llegó a Punta Hermosa y, como el chalaco es respetado, le dieron un lugar exclusivo en un tono. Vendía imagen, bien elegante, una mano en el bolsillo, lentes oscuros, encima tomaba poco y las chibolas lo miraban como si fuera un ‘Porsche’. Lo que ellas no saben es que el hombre va en su auto solo a los tonos, porque los demás días chapa su rica combi y paga su ‘china’. Y no va ser.

Se me cayó ese chibolo que jugó en Ayacucho y este año no pintó en el Rímac. Tiene un hermano que anda con la clavícula rota y fue a tocarle la puerta para que lo apoye con medicinas, pero el pelotero se hizo el loco y le dijo que busque chamba. Qué feo.

Así que el ‘Motorcito’ estuvo en la rumba que el ‘Churrito’ hizo por su cumpleaños en el sur. Dicen que fue el secretario de ‘organización’, se ocupó de los detalles para que todo salga bien. Lo malo es que no ‘pescó’ nada y las muchachitas se fueron con los más chibolos. Los años no pasan en vano.

Por si acaso, mañana vengo más afilado que nunca con el ranking de lo bueno, lo malo y lo feo del 2015. No vale picarse. Me voy, soy fuga.

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