Orgulloso de sus raíces. Elliot Urcuhuaranga Cárdenas, conocido como ‘Elliot Túpac’, viene de una generación de artesanos. Su padre Fortunato es un especialista en las mantas matiz de Huancayo y en ‘carteles chicha artesanales’, y su madre es una experta bordadora. Estudió Economía y Comunicación, lo que le sirvió para direccionar su carrera como diseñador. Elaboró un ‘doodle’ especial por Fiestas Patrias en . Además, sus obras se han exhibido en Francia, México, Chile y Argentina. Y las grandes empresas peruanas lo contratan para que plasme sus ideas en sus productos.

Creces dentro de un taller, donde tu padre hacía estos afiches, ¿qué es lo que más te llamó la atención?
El dibujo siempre me gustó y eso lo adquirí de mi familia que trabajaba de manera manual el dibujo y el diseño en temas artesanales. El mapa y los personajes del Perú me los sabía de memoria, hasta recibí un diploma por mi habilidad. Tengo ocho hermanos y todos vinculados a esto.

Ustedes decían que no son los creadores de los ‘afiches chicha’, pero si tuvieras que destacar tu aporte, ¿cuál sería?
Cuando estuve en la universidad y mis compañeros me preguntaron a qué me dedicaba, les dije que hacía carteles, serigrafía ‘chicha’ y sentía que eran distantes con este trabajo, por lo que decidí ocupar la línea estética con colores fosforescentes, el fondo negro y a dar frases de lo que deseo a una nueva sociedad.

Viendo tu historial, ¿en qué etapa profesional te encuentras y hacia dónde apuntas?
No puedo decir que estoy mejor que antes, me siento bien y tranquilo. Mi ideal es que este trabajo siga desarrollándose, que se mantenga con los años.

¿Tener un taller como el tuyo es rentable?
Estoy cómodo haciendo lo que me gusta, también me estreso porque tengo mucho trabajo que hacer, paso horas, sueño con el trabajo.

¿Cuál dirías que fue el momento en el que te haces conocido?
Siempre hubo etapas. Cada año se han nutrido mis trabajos, hice una producción para Claudia Llosa de ‘Made in USA’, luego una portada para una revista inglesa de diseños, enseguida salí a Chile, hice la portada de ‘Somos’ y así se fueron dando otras cosas.

¿Qué cualidad debe tener el joven al que le gusta el dibujo y quiere dedicarse a este negocio?
Hay una cosa que cuestiono mucho, el talento es una condición, pero no es suficiente. La disciplina es lo más importante, esto profesionaliza su trabajo. Soy letrista, dibujante y todo lo demás, es mi profesión, si no genero disciplina, no puedo darle continuidad a lo que hago.

¿Has recibido críticas por tus trabajos que son caros? ¿Cuánto pueden llegar a costar?
Cuando empecé a hacer esto solo quería mostrar mi talento y dibujaba en la calle, era un desprendimiento de hacer obras. En mi taller, la producción tiene un costo, entre 100 a 200 dólares la serigrafía. A nivel monetario vivo del diseño para instituciones corporativas.

¿Al peruano le gusta el color chillón?
Al peruano en general, sí. Hay una fuerte frustración colectiva y mucha gente se distancia de colores asociados a la periferia. Es tonto porque no tiene un sustento firme, solo porque es de barrio. El color es un canal para comunicar cosas que más me importan.

¿Qué color identifica al Perú?
Muchos pueden tener una opción, pero a mí me gusta el color rosa.

¿Cuál es el mejor consejo que te dio tu padre?
Mis padres son los formadores de una educación muy completa. De parte de mi familia, la pauta general es el respeto, tratar bien a la gente.

¿A quién admiras en este rubro?
Admiro a las personas de oficio, son trabajos que ellos mismos lo generan desde sus necesidades, hacen cosas tan lindas con un sentido popular.

¿Cómo nos ven en el exterior?
El Perú tiene en estos tiempos una repercusión afuera asociado al tema gastronómico, al tema cultural y turístico.

¿Hay algún país que tenga similitud con este tipo de arte?

Las zonas populares de cualquier país tienen ese acercamiento de color constante y hay sociedades más complejas, como la de México, que tienen un parecido estético, por ello admiro esa cercanía visual.

TIPS:
* Ser conscientes de nuestras capacidades, muchas veces hacemos cosas que realizan otros porque les va bien y eso se debe evitar.
* Disciplina. Si no hay orden que te permita proyectarte, no te sirve de nada.
* Cada vez que uno va creciendo debe invertir en libros, en estudios, en un taller, es bueno hacerlo para crecer.

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