Entregó lo mejor de sí misma en favor de la juventud de Iquitos por siete años como parte del programa social “Jóvenes productivos” del , pero denunció haber sido despedida arbitrariamente tras comunicarle a sus superiores que estaba embarazada.

“Actualmente tengo cinco meses de gestación y me han sacado del trabajo, simplemente aduciendo que mi contrato ha terminado bajo el régimen laboral CAS. Y yo me pregunto: ¿dónde está la Constitución que a mí me ampara en el artículo 23?”, señaló Jéssica Noriega Olórtegui a las cámaras de América Noticias.

La mujer informó a su entonces jefe directo, Max Vela Cahuaza, a través de un documento, que tenía 13 semanas de embarazo por lo que este contactó sobre su estado a Christian León Porras, director del mencionado programa del Ministerio de Trabajo y Promoción de Empleo, y lo que este le dijo –según denunció– fue que “una mujer embarazada no es productiva”.

Consultado al respecto, León Porras rechazó tajantemente la acusación y dijo que la razón por la que se decidió poner fin al contrato de Jéssica Noriega Olórtegui se debe a una falta administrativa que cometió, sin embargo, esto no se le informó en la carta que se le entregó a la gestante.

En tanto, Jéssica Noriega Olórtegui aseguró estar dispuesta a luchar hasta el final para que se reconozcan sus derechos como colaboradora del programa social "Jóvenes productivos" del Ministerio de Trabajo y Promoción de Empleo ahora que está a punto de convertirse en madre.

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